Camino en el campo, con árbol.
Anochecer.
Estragon, sentado en el suelo, intenta descalzarse.
Se esfuerza haciéndolo con ambas manos, fatigosamente. Se detiene, agotado,
descansa, jadea, vuelve a empezar. Repite los mismos gestos.
Entra Vladimir.
estragon (renunciando
de nuevo): No hay nada que hacer.
vladimir (se acerca a pasitos rígidos, las piernas separadas): Empiezo a
creerlo. (Se queda inmóvil.) Durante
mucho tiempo me he resistido a pensarlo, diciéndome: Vladimir, sé razonable,
aún no lo has intentado todo. Y volvía a la lucha. (Se concentra, pensando en la lucha. A Estragon.) Vaya, ya estás
ahí otra vez.
estragon: ¿Tú crees?
vladimir: Me alegra volver a verte. Creí que te habías ido
para siempre.
estragon: Yo también.
vladimir: ¿Qué podemos hacer para celebrar este encuentro? (Reflexiona.) Levántate, deja que te
abrace. (Tiende la mano a Estragon.)
estragon (irritado): Enseguida,
enseguida.
(Silencio.)
vladimir (ofendido, con
frialdad): ¿Se puede saber dónde ha pasado la noche el señor?
estragon: En un foso.
vladimir (estupefacto):
¡Un foso! ¿Dónde?
estragon (sin
gesticular): Por ahí.
vladimir: ¿Y no te han pegado?
estragon: Sí.. No demasiado.
vladimir: ¿Los de siempre?
estragon: ¿Los de siempre? No sé.
(Silencio.)
vladimir: Cuando lo pienso... desde
entonces... me pregunto... qué hubiera sido de ti... sin mí... (Decidido.) Sin duda, a estas horas,
serías ya un montoncito de huesos.
estragon (profundamente enojado): ¿Algo más?
vladimir (agobiado): Es demasiado para un hombre solo. (Pausa. Con vivacidad:) Por otra parte, es lo que me digo: para qué
desanimarse ahora. Hubiera sido necesario pensarlo hace una eternidad, hacia
1900.
estragon: Basta. Ayúdame a quitarme esa
porquería.
vladimir: Hubiéramos sido de los primeros
en arrojamos juntos, cogidos de la mano, desde la Torre Eiffel. Entonces
valíamos algo. Ahora es demasiado tarde. Ni siquiera nos permitirían subir. (Estragon se encarniza con su calzado.) ¿Qué
haces?
estragon: Descalzarme. ¿No lo has hecho
nunca?
vladimir: Desde hace tiempo vengo
diciéndote que hay que descalzarse todos los días. Más te valdría hacerme caso.
estragon (débilmente): ¡Ayúdame!
vladimir: ¿Te sientes mal?
estragon: ¡Mal! ¡Me pregunta si me siento
mal!
vladimir (encorajinado): ¡Siempre eres el único que sufre! Yo no importo
nada. Quisiera verte en mi lugar. Ya me lo harías saber.
estragon: ¿Has estado mal?
vladimir: ¡Mal! ¡Me pregunta si he estado mal!
estragon (señalando con
el índice): Ésa no es razón para no abrocharte.
vladimir (Se inclina.):
Es cierto. (Se abrocha.) No hay
que descuidarse en las pequeñas cosas.
estragon: Qué quieres que te diga, siempre esperas al último
momento.
vladimir (soñadoramente): El último momento... (Medita.) Tarda en llegar, pero vale la pena. ¿Quién lo decía?
estragon: ¿No quieres ayudarme?
vladimir: A veces me digo que, a pesar de
todo, llega. Entonces me siento muy raro. (Se
quita el sombrero, mira dentro, pasa la mano por el interior, lo sacude y se lo
encasqueta de nuevo.) ¿Cómo decirlo? Aliviado y al mismo tiempo... (Busca.)... aterrado. (Con énfasis.) A-TE-RRA-DO. (Se vuelve a quitar el sombrero y mira el
interior.) ¡Vaya! (Golpea la copa
como para hacer que algo caiga del interior, mira hacia dentro otra vez y se lo
encasqueta de nuevo.) En fin... (Estragon,
como recompensa a su gran esfuerzo, logra descalzarse. Mira el interior de su
zapato, pasa la mano por el interior, le da la vuelta, lo sacude, busca en el
suelo por si ha caído algo, no encuentra nada, y vuelve a pasar la mano por el
zapato, la mirada vaga.) ¿Y?
estragon: Nada.
vladimir: A ver.
estragon: No hay nada que ver.
vladimir: Intenta ponértelo otra vez.
estragon (después de
examinarse el pie): Voy a dejar que se airee un poco.
vladimir: He aquí al hombre íntegro arremetiendo contra su calzado cuando el culpable es el pie. (Se quita el sombrero una vez más, mira en su interior, pasa la mano por el interio del sombreror, lo sacude, golpea la copa, sopla hacia dentro y se lo encasqueta de nuevo.) Esto empieza a resultar inquietante. (Pausa. Estragon agita el pie, moviendo los dedos para que el aire circule mejor entre ellos.) Uno de los dos ladrones se salvó. (Pausa.) Es un porcentaje decente. (Pausa.) Gogo...