Los dinosaurios en el siglo XXI

Nuestra perspectiva científica acerca de los dinosaurios ha sufrido profundos cambios en las últimas décadas. Desde hace unos treinta años el estudio de los dinosaurios ha estado dominado por el paradigma paleobiológico conocido comúnmente como «Dinosaur Renaissance» («Renacimiento de los dinosaurios»). El objetivo de este libro es realizar una puesta al día de tres de los aspectos actuales del estudio de los dinosaurios que han generado perspectivas más novedosas dentro del paradigma: biología reproductiva y del desarrollo, coevolución dinosaurios-plantas y la problemática de la transición dinosaurios no avianos-aves. Esta introducción trata de contextualizar las propuestas de los diferentes autores sobre la triple temática antes referida. Para ello, se ha abordado, en primer lugar, la definición actual de dinosaurio desde un contexto filogenético. Luego se considera la diversidad de los linajes principales dinosaurianos conocidos en la actualidad. Por último, se atienden determinadas cuestiones sobre diversidad y tendencias evolutivas.

 

 

¿Qué es un dinosaurio?

 

El registro fósil nos indica que hace más de 360 millones de años (Devónico Superior) aparecieron los primeros vertebrados dotados de extremidades apropiadas para andar sobre tierra (tetrápodos). Todavía existen representantes de estos vertebrados terrestres primitivos, los anfibios (salamandras, ranas y sapos) (figura I.1). Los tetrápodos basales abundaron durante algunos millones de años, hasta la aparición de un nuevo linaje tetrapodiano destinado a dominar los ecosistemas terrestres, los amniotas. La principal novedad evolutiva de los tetrápodos amniotas es la aparición de una serie de membranas que permiten al embrión desarrollarse dentro de un huevo depositado en un ambiente situado fuera del agua. El registro fósil conocido establece una edad mínima de unos 315 millones de años (Carbonífero Medio) para la aparición de estos primeros amniotas, que dieron lugar a dos grandes linajes de vertebrados terrestres: sinápsidos y reptiles (figura I.1). Los primeros constituyen el grupo de amniotas de los que procedemos los mamíferos. Los sinápsidos basales, premamiferianos, fueron elementos de gran importancia en las faunas terrestres del Pérmico y comienzos del Triásico.

 

Nuestro concepto de reptil ha variado en los últimos años, con la implantación en biología de la sistemática filogenética. Actualmente consideramos que el linaje de los reptiles incluye las tortugas, los lagartos y serpientes, los cocodrilos y las aves, además de muchas otras formas extintas, como pterosaurios y la mayoría de los dinosaurios (aquellos que no son aves). En términos un poco más sistemáticos podríamos definir los reptiles como el antecesor común más reciente de tortugas y aves y de todos sus descendientes. Los reptiles incluyen dos grupos principales: anápsidos (representados actualmente por las tortugas) y diápsidos (el resto de linajes reptilianos antes enumerado). Esta dicotomía basal de los reptiles es la propuesta de mayor consenso entre los investigadores, aunque existe en la actualidad una hipótesis alternativa, que propone a los quelonios como diápsidos derivados (Rieppel y De Braga, 1996; Zardoya y Meyer, 1998) (figura I.1). Sea cual fuere la posición filogenética de las tortugas, los principales linajes de reptiles diápsidos incluyen lagartos, serpientes y formas emparentadas (lepidosaurios) y cocodrilos, dinosaurios y formas de genealogía cercana (arcosaurios). El término arcosaurios significa «saurios dominantes», ya que han constituido una fracción muy significativa de las faunas de amniotas desde el Triásico Medio-Superior, especialmente durante el Jurásico y el Cretácico. A partir de la gran crisis biótica del límite Cretácico-Terciario (hace unos 65 millones de años) los arcosaurios han llegado hasta nuestros días representados por una veintena de especies de cocodrilos y unas 10.000 de dinosaurios avianos (aves). El linaje de arcosaurios que conduce a los cocodrilos se denomina crurotarsios. El grupo genealógico de arcosaurios más estrechamente emparentado con las aves (que incluye a los pterosaurios y al resto de los dinosaurios) se llama ornitodiros. En definitiva, los dinosaurios son tetrápodos amniotas reptiles diápsidos arcosaurios ornitodiros no pterosaurios.