Sunless 1
En cierta ocasión, Sunless fue al
médico.
Esperó en recepción hasta que pronunciaron su nombre, y
entonces recorrió una alfombra de color burdeos hasta
el despacho del médico, un doctor tan famoso que en la puerta no había puesto
el título de «Doctor» antes de su nombre, sino simplemente «Sr. Fargoon». El despacho no se parecía a la consulta de un
médico: la luz era baja y tenue, y las paredes estaban cubiertas de estanterías
con libros. Una planta verde pálido se extendía hasta la ventana desde un
escritorio de roble pulido. El señor Fargoon llevaba
un traje de lino blanco y una corbata azul, y no levantó la mirada cuando Sunless se dirigió a la silla que había delante del
escritorio. Detrás de Fargoon, en la pared, Sunless vio el dibujo de un pez. Ni mar, ni pescador, ni
cielo. Sólo un pez. Ni siquiera decía qué clase de pez era.
–Señor Sunless, siéntese, por
favor.
Fargoon le indicó el sillón y abrió su
historial.
–En realidad es «Sunless». Sin el
«señor» delante.
–Tomo nota. –Fargoon tachó algo y
siguió sin mirarle–. Tenemos aproximadamente una
hora, Sunless, y mucho de que hablar.
–Ya veo.
–¿Por qué cree usted que está aquí?
–No lo sé, al menos no esta vez.
–En ese caso, limítese a hablar de sí mismo.
Sunless señaló con la mirada:
–¿Por qué no hay mar alrededor del
pez?
–¿Qué? –Fargoon
se volvió hacia el dibujo y enarcó una ceja–. No, no,
empecemos. No disponemos de mucho tiempo, ¿entiende?
–Entiendo.
Fargoon miró la barbilla de su paciente.
–Su estado general, Sunless.
Sunless habló durante una hora, quizás un
poco más. Fargoon no decía nada, pero escribía mucho,
pasando una página tras otra en silencio. Cuando Sunless
hubo terminado, Fargoon continuó sin decir palabra.
Después arrancó un trozo de una hoja y escribió algo. Se lo entregó a su paciente.
–Esto es lo que usted tiene –dijo.
Sunless leyó dos palabras.
–Es mi diagnóstico –dijo Fargoon–. Y ahora le voy a leer un resumen de lo que
significan estas dos palabras. –Alargó un brazo hacia atrás y tomó un
Sunless se levantó con la intención de
abandonar el despacho de Fargoon. Pero antes de irse
le dijo algo. Dijo:
–Yo tengo mi propia definición.
–¿De veras? –dijo Fargoon
mientras tomaba notas en su cuaderno.
–Sí.
–Pues bien, oigámosla.
Fargoon cerró
Sunless 2
Sunless, «Sin Sol», menudo nombre. A Sunless
le gustaba dejarlo tal cual. No tenía apellido porque un nombre era suficiente,
y de todos modos creía que lo que le pasaba no tenía un nombre, o tenía muchos,
lo que venía a ser lo mismo. Un nombre bastaba para casi todo, pensaba Sunless.
Aquella visita a Fargoon no había
sido la primera.
No, Sunless
ya había estado en la consulta de Fargoon hacía más o
menos un mes, sólo que en aquella ocasión Fargoon
llegó tarde y Sunless tuvo que esperar en el
vestíbulo principal, donde otras personas aguardaban ante las consultas de
otros médicos. Tomó asiento en una de las sillas de la hilera.
En la pared blanca de enfrente había una televisión que
tenía puesto
Una voz de mujer se superponía a la imagen del hombre:
«¿Está todo el día cansado?
¿Experimenta cambios de humor?
»¿Le irritan los niños, el ruido, el
trato con los demás? ¿A menudo le apetece estar solo? Si ha experimentado
alguno de estos síntomas en las últimas semanas, tal vez padezca Trastorno
Agudo de la Sensibilidad, o TAS. Acuda a su médico. En la pantalla aparece una
lista de los médicos a los que puede dirigirse. Si lo desea, tiene la
posibilidad de probar un producto que alivia estos síntomas. Póngase en
contacto con Pharmalak y recibirá una muestra
aproximadamente cuatro días antes de su primera visita.
»Y sigamos con las noticias. Una
nueva tormenta azota Salt Lake Valley
y ha causado daños en cientos de hogares. La policía aconseja a los
propietarios que hagan frente a la tormenta con sus propios medios hasta que
empiecen las tareas de limpieza.
»Estas noticias pueden provocar ansiedad, pero ¿se siente
usted incómodo en los festejos y conmemoraciones sociales?, ¿excluido en las
fiestas?, ¿sistemáticamente decepcionado? ¿Acaso no se han cumplido sus
expectativas, o se siente aislado y agobiado por anticipado? Tal vez padezca
Trastorno de Ansiedad Estacional, o TAE. Hemos desarrollado un producto que
alivia los síntomas de este trastorno. Acuda a su médico. En su pantalla
aparece una lista de médicos a los que puede dirigirse. Si lo desea...»