Quessada, Dominique
CIENCIAS SOCIALES (NF). Sociología
Julio 2006 Ensayo E 64 ISBN: 978-84-8310-444-6 432 pág. 21,15 € (IVA no incluido) |
SINOPSIS
A primera
vista, la publicidad es una negación de la filosofía, una especie de
antifilosofía, pues, frente a la tradición y el logos, parece marcada por la
trivialidad y el fomento de las pasiones propios de nuestro tiempo. Sin
embargo, Quessada ve en esta oposición una simetría íntima: lejos de pertenecer
a la imagen, la publicidad corona el reino del discurso y compite con la
filosofía en la definición de la ciudad platónica.
La tesis de este brillante ensayo
es audaz: hija de la sofística y la democracia, la publicidad completa el
trabajo inacabado por la filosofía. Ante el fracaso de Platón a la hora de
gobernar la ciudad, la publicidad recupera la gestión racional del mundo y
encarna sus ideales en las sociedades democráticas modernas. El publicitario,
convertido en el nuevo filósofo platónico, propone acceder a la felicidad
mediante la racionalidad y la sofística; triunfa así en la creación de una
nueva entidad lógica y política: el siervoseñor. Surgido del núcleo
problemático de nuestras democracias, «el siervo se hizo señor del señor
haciendo indiscernible la diferencia entre uno y otro». Quessada define con
maestría las prácticas retóricas del discurso utilizado por la publicidad y los
rasgos que definen al hombre contemporáneo.
Dominique Quessada es doctor
en filosofía por la Sorbona. Autor de Le
nombril des femmes, un conjunto de reflexiones en torno a la mujer, en 1999
Quessada publicó La société de
consommation de soi, donde analiza cómo la publicidad corona el reino del
discurso y reemplaza a la política en la organización de la estructura social.
En La era del siervoseñor, recupera
y ahonda definitivamente en este acercamiento: la publicidad no sólo compite
con la política en su objetivo, sino que culmina la labor de la filosofía.