También Berlín se olvida

Portada de También Berlín se olvida

Morábito, Fabio


Febrero 2004
Andanzas CA
ISBN:
104 pág.

SINOPSIS

Convertida en una de las referencias preferidas para ilustrar los desvaríos políticos que marcan al siglo XX, la ciudad de Berlín se dibuja en estas páginas merced a una mediación que es, al mismo tiempo, un juego de dualidades: el autor que medita, el viajero que escribe, el escritor que relata, el narrador que conmueve.

Con calles donde un accidente de tránsito motiva una situación de cierta irrealidad, Berlín se vuelve aquí un mapa cifrado por las palabras de un testigo privilegiado por su sensibilidad. Así aparecen el misterio de una panadería y un parroquiano –casi- fantasmagórico, la sensualidad de un turco voyeurista en un lago donde se practica el nudismo, las casas diminutas que cerca de los rieles y su trepidación resultan un inverosímil refugio de los berlineses en asueto.

La agitación cosmopolita que distinguió a esa ciudad alemana antes de la II Guerra, el muro que marcó su división geopolítica posterior, su carácter emblemático, resultan aquí pertinentes y relevantes. Aunque por encima de estas cuestiones, este libro hace de Berlín un bien entrañable e inolvidable para todo lector: palabras, memoria y dedicación generosa de un autor excepcional.


Morábito, Fabio
NOTAS BIOGRÁFICAS

El poeta y narrador Fabio Morábito (1955) es autor de tres libros de poesía: Lotes baldíos (1985, Premio Carlos Pellicer), De lunes todo el año (1991, Premio Aguascalientes) y Alguien de lava (2002). Caja de herramientas (1989), que participa tanto del ensayo como del poema en prosa, fue publicado en Alemania, Inglaterra y Estados Unidos. Su obra cuentística se compone de La lenta furia (Andanzas, 2002), elogiado en su momento por José de la Colina como «la mayor revelación del género de los últimos años», La vida ordenada (Andanzas, 2000; Andanzas 495) y También Berlín se olvida (Andanzas, 2004).

«Desde sus iniciales ejercicios literarios se reveló como uno de los “raros” de la lengua. Desconcertó a algunos y fascinó a otros cuantos. Quien pretenda imitarlo se arriesga a cometer un suicidio. Su prosa elegante y exquisita es irrepetible. Nada de pomposo se acerca a su mundo. Parecería que sus palabras, precisas y transparentes, le sirvieran como un encantamiento, un regalo, un guiño a los lectores. Pero en el subsuelo se encuentra una lava ardiente, un nudo de interrogaciones e hipótesis cercanas a una meta-física». (Sergio Pitol)

TÍTULOS DEL AUTOR EN TUSQUETS: