Cuando hace dos años dimos a conocer Agua (Andanzas 353), tras
ser publicado por Tusquets Editores
Argentina en 1997 con un clamoroso éxito de crítica y público (y
traducciones en Francia y Gran Bretaña), ya augurábamos un prometedor futuro
para Eduardo Berti. Con su segunda
novela, La mujer de Wakefield, se
confirman definitiva y plenamente nuestras expectativas.
En ella, Eduardo
Berti da una vuelta de tuerca al famoso relato Wakefield de Nathaniel Hawthorne, otorgándole una
perspectiva nueva y conmovedora al convertir, con extrema destreza, a la esposa
abandonada y sumisa en protagonista de una historia de indudable actualidad.
En el seno de un respetable matrimonio londinense del siglo
XIX ocurre un día un hecho insólito: Charles
Wakefield, el marido, le dice a su esposa, Elizabeth, que debe salir de viaje por unos días. Al poco tiempo, Elizabeth descubre la absurda realidad:
su marido lleva una vida furtiva a pocas calles de su casa. En una sociedad en
que una mujer sin marido no es bien vista —y en la que, como trasfondo, aparece
el «movimiento luddita» contra las máquinas de la Revolución Industrial—, la mujer de Wakefield descubre que debe
valerse por sí misma, y decide desentrañar qué ha motivado la huida de Charles. En sus pesquisas, y durante la
espera, que será de años, la esposa abandonada aprende a medir el paso de los
días y el peso de la vida.
INFORMACIÓN COMPLEMENTARIA
Clarín
"Si toda reescritura carga consigo una "angustia de las influencias", Berti no sólo sale victorioso del trance, sino que lleva las cosas al punto de hacer del maravilloso relato de Hawthorne una continuación, una segunda parte."
Guillermo Piro
Trespuntos
"Berti consigue una novela exquisita y un personaje memorable."
XXI
"(…) una mirada original: la de la mujer abandonada y su periplo hacia cierta forma de sabiduría."
Eduardo Berti
nació en Buenos Aires en 1964. Autor de libros periodísticos y documentales televisivos, publicó el libro de relatos Los pájaros, que le valió la beca de la revista Cultura y el diario Página/12 consideró entre lo mejor de la ficción argentina de 1994. Su primera novela, Agua (Andanzas, 1997) fue unánimemente elogiada en la Argentina y en España y acaba de ser editada en Francia bajo el sello Grasset.