Un relato de este libro describe un viaje de placer, que dos
parejas urbanas emprenden hacia Puerto
Solar. Ahí, la realidad despliega ante ellos dificultades y gratificaciones
previsibles. No obstante, un hecho accidental
acarrea efectos cataclísmicos, aterradores,
que conducen a la inquietante involución de los personajes. Así estos cuentos
nos ofrecen una clave esencial para
comprender cabalmente su propuesta: la multiplicidad e interconexión de
diversos planos de la existencia, el
carácter circular de las historias, la fuente mitológica de toda narración, las
teogonías que no dejamos de idear y
compartir en la literatura. Dos líneas que se alternan siguen los textos
contenidos en estas páginas: una que surca el terreno de mitos y arquetipos, otra que parece anclarse en el campo de lo real sólo para hacerlo explotar y
franquear el paso a lo fantástico.
Con una escritura minuciosa que alcanza niveles de impecable originalidad y maestría, Mario González Suárez nos
presenta una visión de dos mundos paralelos y por igual turbadores donde acaso sueña la vida de los hombres.
Mario González Suárez nació en Ciudad de México en 1964.
Es profesor de la Universidad del Claustro de Sor Juana, imparte clases en
talleres literarios y es autor de Nostalgia
de la luz (1996) y del conjunto de relatos La materia del insomnio (1997). Con El libro de las pasiones
(1999) obtuvo en México el Premio
Gilberto Owen, convocado por el Gobierno del Estado de Sinaloa, y el Premio Nacional de Literatura José Fuentes
Mares, otorgado por la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez. En 2002,
González Suárez quedó ganador del I
Premio de Relato Emecé/Zoetrope por el cuento Lo que marque el taxímetro. Con su relato Los fríos participó
también en el volumen de Cuentos eróticos de verano,
publicado por Tusquets Editores (La Sonrisa Vertical 119).