Pocas veces en la literatura brasileña se han dado obras de la calidad de El alienista en el género del cuento. Publicado por entregas en A Estacão en 1882, apareció el mismo año incorporado al libro Papéis Avulsos, donde se mantiene desde entonces. En El alienista, Machado de Assis, con su proverbial sagacidad, hace reír al lector que, sin perder de vista que se encuentra ante una ficción, no puede evitar identificarse con los personajes que pasean su locura pacífica a lo largo del cuento. Es difícil quedar ajeno al efecto de El alienista sobre nuestros hábitos y convenciones. Más que en cualquier otra obra suya, la sátira se hace contra el hombre que ambiciona el mando, contra las promesas del Poder y sus grotescas consecuencias.
Nace en
1839 en una barriada miserable de Río de Janeiro, cuando Brasil, como na-ción
independiente, tenía tan sólo diecisie-te años de vida. Río era entonces poco
más que una aldea. Hijo de obrero, Machado
de Assis fue autodidacta, y su historia está íntimamente vinculada a la del
nacimiento y vertiginoso desarrollo de su país. Hizo un poco de todo hasta
conseguir un puesto como tipógrafo de imprenta. Desde la publicación de su
primer poema en 1855 hasta su muerte en 1908, fue ascendiendo poco a poco a los
más altos cargos adminis-trativos del Ministerio de Agricultura. En 1897, fue
elegido presidente de la recién creada Academia Brasileña de Letras.
Anti-clerical, escéptico –por su origen– ante to-do tipo de jerarquías,
introvertido, sarcás-tico y ambicioso, Machado
de Assis ha expresado en sus obras sus ideas sobre la sociedad de su
tiempo. Las más importan-tes son: Papéis
Avulsos (1882), Quincas Borba
(1891) y Dom Casmurro (1899).