Los Bioy, título que
quedó entre los finalistas del XIV Premio Comillas de biografía, autobiografía
y memorias, constituye un documento excepcional y peculiar. Todo comenzó en
1949, cuando Jovita Iglesias, recién llegada de Argentina, conoció a Silvina
Ocampo. El deslumbramiento fue mutuo: Jovita se sintió impresionada
por esa mujer dedicada a la literatura y que vivía con el también escritor Adolfo
Bioy Casares, y Silvina supo que esa encantadora jovencita había
llegado a su vida para quedarse. Durante casi cincuenta años, Jovita trabajó
y vivió con el matrimonio, y fue testigo de los amores, alegrías, desencuentros
y tragedias de la familia. Silvia Arias recoge la palabra de Jovita,
que cuenta con ternura, humor y sinceridad, y muchas veces melancolía, episodios
desconocidos que revelan la faceta más humana de los dos célebres escritores
argentinos.
Nació en Pacios de Toubes de Villa Rubín, Orense (España), en 1925.
Llegó a Argentina en 1949 y a los pocos días conoció a Silvina Ocampo, esposa
de Adolfo Bioy Casares. Desde entonces y hasta la muerte del escritor, acaecida
en 1999, Jovita compartió la vida de la familia Bioy, primero en el apartamento
de Santa Fe y Ecuador, y luego en el piso de la calle Posadas: fue ama de
llaves, confidente y amiga de ambos, especialmente de Silvina. En la actualidad
vive en el barrio porteño de Palermo con su marido, José Montes Blanco, quien
también desempeñó tareas en casa de los Bioy
Nació en Tres Arroyos, provincia de Buenos Aires, en 1963, y en 1984 se
trasladó a Buenos Aires, donde reside, para cursar estudios de periodismo.
Desarrolla su actividad periodística en Editorial Perfil y ha colaborado en
varias publicaciones culturales. En 1998 sacó a la luz su primer libro, Bioy en privado, donde reunió sus
conversaciones con Adolfo Bioy Casares a lo largo de cinco años. Forma parte
del Taller Literario de Abelardo Castillo, y actualmente prepara un libro de
cuentos y trabaja en su primera novela.