Cuando sólo
contaba 25 años de edad, James Dewey Watson tuvo la inteligencia, la
inspiración y la fortuna de realizar, junto con su amigo Francis Crick, uno de
los descubrimientos más decisivos en la historia reciente de la biología: la
estructura en doble hélice del ácido desoxirribonucleico, o ADN. Eso ocurría en
1953, y lo que siguió fue una emocionante y durísima competición entre
científicos e investigadores norteamericanos y europeos para continuar
desentrañando los secretos de la vida. Por otra parte, Watson empezaba a
conquistar la fama, pero aún tenía que conquistar a la chica de sus sueños.
Este libro es el relato, rebosante
de humor, ironía y nostalgia, de aquellos turbulentos y fascinantes años
cincuenta y sesenta, de la incansable actividad de las mejores cabezas
científicas de la época, así como de la intensa y a menudo disparatada vida
social de los campus universitarios: las fiestas, los altibajos sentimentales,
las novatadas entre colegas... Y entre todos destaca la imagen del legendario
George, «Geo», Gamow, el gran físico de origen ruso a quien apasionaban tanto
la genética como los juegos de cartas y el whisky.
INFORMACIÓN COMPLEMENTARIA
Una mirada impagable al círculo intelectual que nutrió el revolucionario paradigma de Watson.
The New York Times Book Review
Un libro repleto de momentos jugosos.
The Washington Post Book World
Hace revivir el fascinante consorcio
de cerebros [...] que incluía al químico estadounidense Linus Pauling, el Premio Nobel Richard Feynman, el teórico de origen ruso George «Geo» Gamow...
Tribune
James D. Watson nació en
Chicago en 1928. Estudió en las universidades de Chicago e Indiana antes de
trasladarse a Europa en 1951. En Cambridge entró en contacto con el científico
británico Francis Crick y en 1953 ambos publicaron en Nature un célebre y breve texto en el que daban cuenta del
descubrimiento de la estructura de la molécula del ADN. En 1962, Watson, Crick
y M. Wilkins obtuvieron el Premio Nobel de Medicina por ese gigantesco progreso
de la biología moderna. En 1956 Watson comenzó a trabajar en la Universidad de
Harvard. Desde 1968 dirige el laboratorio de Cold Spring Harbor de Nueva York,
donde ha centrado sus investigaciones en la lucha contra el cáncer. Es miembro
de la Academia Nacional de Ciencias y de la Royal Society.